Xogo - Lembranzas: God of War (Playstation 2)

Analizo God of War: el clásico videojuego del año 2005 para Sony Playstation 2. 

 🔊Nota:Todas mis entradas suelo reeditarlas tanto para añadir contenido o mejorarlas. En este caso deseaba que la de este juego coincidiera con la primera semana de octubre, por eso que si veis que falta aclarar algo, aún así lo veréis por el momento en la sección de "Lo mejor" y de "Lo peor".

Durante un tiempo fue protagonista de prensa especializada, de corrillos y habladurías. Un título que llegó al principio de tapadillo y sin hacer apenas ruido pero que, a medida que iban pasando los días, sorprendió a todo el mundo, sobre todo por el gran salto cualitativo técnicamente y jugable, respecto a lo que estábamos acostumbrados en su género y habíamos visto con anterioridad. Un videojuego típicamente "Hack and Slash", pero subido de vueltas y a otro nivel. Una mezcla en cierto modo de la saga Prince of Persia con la acción más desenfrenada de Devil May Cry. El juego destacaba por sus gráficos impresionantes, su variedad de niveles y el diseño de los enemigos, pero aún más por trasladar a la pantalla una exquisita ambientación y jugabilidad. Kratos irrumpía así a patadas por la puerta grande, convirtiéndose en el inicio de toda una saga y el protagonista de uno de los más míticos videojuegos de la historia y del extenso catálogo de Playstation 2. 

Señoras, señores, damas y caballeros... Dejad lo que estéis haciendo, porque hoy voy a hablaros de:

Prepararsus, que lo vais a flispar...

No nos engañemos, muchachada: God of War destacó sobre todo por su violencia extrema y gore desmedido. Un videojuego cocido a fuego lento, pero que ya llevaba en la olla presumiblemente desde  el año 2001. Fue en marzo de 2005 cuando pudimos disfrutarlo, y aunque en ordenadores ya habían hecho los deberes con otros títulos muy bestias como Carmageddon o Blood (ambos de 1997), en el caso del espartano su salida en consolas supuso el pistoletazo para la madurez gráfica y violenta que estaba por venir.

Uno de los estudios internos de Sony en Los Ángeles (Santa Mónica Studios), sería el equipo que daría forma a esta joya, desmarcándose así de la tendencia a que los grandes encargos vinieran siempre desde el lejano oriente. Con el tiempo, aunque no demasiado sino al poco de su salida, God of War acabó convirtiéndose en una obra casi de culto que todo el mundo quería jugar. Despuntando incluso por encima del que en ese entonces se le consideraba el rey del Hack and Slash: Devil May Cry. 

Carátula del juego en su versión Platinum - God of War (PS2)

Historia:

La historia de Kratos es cruda y notablemente dramática. Gracias a las cinemáticas asistimos a la historia de un hombre empujado por la codicia, la sangre y la gloria. En un intento de no sucumbir a la muerte, Kratos vende su alma a Ares, el Dios de la Guerra. El trueque parece sencillo y no implica mayor problema, pero conceder la inmortalidad conlleva, sin duda, un pesado y caro precio. Con el tiempo el personaje acaba hastiado y arrepentido, sólo en el mundo e incapaz de superar la pérdida de su familia, y cuando ya ha perdido toda esperanza y se encamina hacia su suicidio, descubre que todavía le queda una baza para conseguir su redención: encontrar la Caja de Pandora y derrotar a Ares con ella, en uno de los duelos finales más épicos que se hayan podido ver en un videojuego. 

El juego comienza con el espartano arrojándose al vacío desde "la montaña más alta de toda Grecia". Un suicidio que los Dioses permutan, dándole la oportunidad de vengarse de Ares, el único pero importante entre nosotros y la libertad. Quisiera hacer aquí un inciso, y es que a mí el tal Dios de la Guerra me recuerda muchísimo a Liam Neeson, el actor irlandés. Anotada la chorrada del día tampoco quisiera destriparos muchos más detalles del juego, aunque de lo que sí estoy convencido es de que la historia y los pasos que sigue para llevarnos a término de la aventura, promete y con rotundidad. Si nunca le habéis echado el guante a este juego, ya tardáis. Pocas veces viviréis una experiencia semejante. 

🔊Nota: Si buscáis la cinemática que da inicio al juego, que sepáis que se considera como incitadora al suicidio. Y para muestra mirad este botón. 

Y conmigo... Que levante la mano quien le haya dado al play - God of War

Bienvenidos a la otra Grecia. Esa que nunca (o sí) existió.

God of War nos traslada a una oscura y decadente Grecia antigua y clásica, periodo que comprende entre el 1200 A.C y el siglo V, aunque en este caso se trata de una versión libre y alternativa creada por la mente de los desarrolladores. Así, nos encontramos seres de su mitología como minotauros y cancerberos, medusas, sirenas o cíclopes, además de otros elementos impepinables de su cultura, pero gran parte de lo que se relata jamás sucedió ni en las creencias griegas de su tiempo ni en la realidad. Hallamos personajes y lugares basados en su mitología como los Dioses del Olimpo, Ares, el Oráculo (nuestra guía), el Toro de Minos, la Caja de Pandora, el Inframundo o la Hidra, pero siempre bajo el filtro e ingenio de los creadores. Sucede lo mismo con las ubicaciones reales, imaginadas con mimo y hasta el extremo, como la Atenas destrozada o el embravecido Mar Egeo. 

Cronológicamente hablando, podría decirse que GOW se sitúa en la línea de tiempo entre otros dos pesos pesados de la saga. En concreto entre Chains of Olimpus (2008) y Ghost of Sparta (2010), ambos videojuegos disponibles para la Sony  Playstation Portable (PSP). Personalmente, y por si queréis un consejo, os diría que jugaseis el juego con sus mismas virtudes y defectos. Tal cual se hizo en su época, con sus más y sus menos, pero disfrutarlo para el mismo sistema que se ideó. En el caso de que podáis hacerlo de este modo, os recomiendo encarecidamente que consigáis algún tipo de hack como FreeMcBoot -sólo en el caso de que no tengáis una copia original- y una Playstation 2 FAT.  Sin filtros y sin gilipolleces como el guardado a conveniencia, y todas esas memeces hechas para nenazas imberbes. Emularlo está bien, pero jugarlo como se jugó en la época, mucho más. Y si eso no es posible, pues nada, a llorar.

Ahora ya en serio, que cada cual lo juegue como pueda y guste, aunque os aseguro que lo que tiene realmente más magia y sentido es hacerlo con hardware original. Y sino, tenéis el emulador PCSX2, con el que podréis jugarlo a 60hz y a mayor resolución. Lo primero es únicamente si queréis tener las mismas sensaciones y comprobar cómo la consolación menos potente de su generación da el do de pecho.

Y hechas las presentaciones, afilad las espadas, sacaros esa melena que da pena, y vamos "pa" allá:

🔊Nota: Al no disponer de una capturadora y como Youtube no me ha hecho millonario, las imágenes adjuntas pertenecen a 'TheGamerKratos'. Es lo que tiene ser pobre y jugar en cosas viejunas.

En el momento de su salida, ver esto en una Playstation 2 era brutaaaaaal. Hidra con pintalabios - God of War

Gráficos:

God of War es apoteósico, una bestia parda en lo suyo. Una patada en la entrepierna a la industria de los videojuegos de su tiempo y una cerrada de bocas absoluta para los detractores de Playstation. Decía la muchedumbre que la consola, siendo la menos potente, no se iba a comer un "colín". El juego fue su respuesta, una auténtica sacada de chorra a dos manos y sacudidas desenfrenadas a las jetas de sus competidores. Parecía que no, pero sí.

Como ya os he dicho, el juego comienza en un Mar Egeo embravecido y rodeado de enemigos. La escena empieza fuerte y sin vaselina, introduciéndonos el dedo por el agujero que más nos duele; impactando y sobrecogiendo al usuario durante los primeros minutos. Hoy día estamos más que acostumbrados a que el hardware mueva miles de millones de polígonos con la punta del rabo (el del Diablo, no seáis mal pensados), pero en el año 2005 y con una máquina tan supuestamente limitada respecto a su competencia directa, ver a God of War en movimiento con toda su parafernalia, era algo digno e increíble de ver. Podría nombraros ahora mismo a otro título que empezaba también subido de pulsaciones y haciendo gala de una gran potencia gráfica: ESDLA - Las Dos Torres, del año 2002. Ya os digo que, aunque no eran los únicos, no era tan habitual. En el caso de GOW resulta además increíble  y gratificante observar a Kratos moviéndose con toda soltura, desmembrando enemigos y sacudiendo cabezas contra la cubierta y sin sufrir ninguna ralentización. Queda más que patente que Playstation 2 puede mover lo que le echen si se programa y diseña en condiciones, y sino que se lo digan a  Gran Turismo 4, Shadow of the Colossus o Final Fantasy XII, entre muchos otros.

Decía un sabio, que empujar un poco era aquello de juntar un c.... con el otro - God of War.

Pero si de algo se enorgullece el juego, además de esta potencia gráfica incomparable en un sistema semejante, es del aspecto gore y la brutalidad de la que hace gala. Por momentos, parece que disfruta al demostrarlo y lo repite hasta la saciedad. El tamaño generoso de los enemigos ayudan además a que cada impacto y movimiento sea muy visible, y fijaos en mis circunstancias y lo mucho que me impresionó en su momento, que cuando lo tuve en mis manos por aquellos años, no llegaba a pasar más allá de la hidra. El juego estuvo en la estantería olvidado hasta que me puse en serio con él el 19 de julio de 2020 con algunos años de idas y venidas. Las mudanzas y los cambios, que me pervierten cosa mala y me tiran más que una cabra al monte. El caso es que estuvo en suspenso porque estaba a otras cosas, pero ya me conocéis. Únicamente lo ponía de vez en cuando para deslumbrarme a mí mismo y a las visitas.

Hasta que finalmente decidí jugarlo en serio y finalizarlo este pasado 18 de Julio de 2025. Curioso, siempre tengo este tipo de coincidencias, pero sólo un día antes con la diferencia de años. Aquí dejo una muestra de cuando empecé la partida:

Que sí, que me lo tomo con calma... - God of War.

Siguiendo con todo el alarde gráfico, hablemos ahora de los escenarios que han tenido a bien desarrollar sus creadores, motivo de muchas babas sobre la pantalla en aquellos años. Entornos de proporciones gigantescas y abismos inconmensurables donde caerse supone la muerte segura, con una ambientación tan bien lograda y en cierto modo realista, que son auténtico oro puro. Los templos son enormes y los palacios realmente bellos, además de estatuas y fondos de paisaje fantásticos y evocadores. Todos aquellos elementos reconocibles de la cultura de Grecia están en este juego. Estructuras, trampas, el diseño y detalle es enfermizo, aunque obviamente sin acercarse a lo visto en los modernos Assasin's Creed; por meras cuestiones de potencia, sin más. Parece mentira que todo esto aparezca en una vieja Playstation 2. Efectos como los reflejos (esos suelos que parece que han pasado hace nada la cera y la mopa), o la niebla y el agua. La altísima calidad de su arte es indiscutible y nada parece colocado a libre albedrío, y si no fuera porque es imposible, cualquiera diría que los de Santa Mónica hicieron un viaje a las ciudades-estado con el DeLorean. El resultado es, si somos capaces hoy día de retrotraernos hasta 2005 en consolas, sobrecogedor. Tan sólo sirva como mero apunte mencionar el templo de Pandora y su arquitectura, de todos los escenarios me atrevería a afirmar que el más alucinante. No es la única localización cuidada y mimada, pero sí es de las que más me han sorprendido,. Otras, como la vieja Atenas ruinosa y asediada, han conseguido que llegase a sentirme como si estuviera en la película de Troya. Y digo aún más: en Lucha de Titanes. 

Abre la boquita,  que te la vas a tragar todita - God of War. 

Las escenas de vídeo, de calidad encomiable y sugerente, ofrecen pistas y detalles importantes para seguir la trama o como preludio para la misión. Luce algo arrugada en estos tiempos aunque el acabado de sus personajes siguen dando la talla. Algunos de ellos sin censura alguna y mostrando sus atributos, lo que me hace pensar que de haber un remake ahora mismo lo habrían "capado". Me resulta curioso que existan por ahí voces discordantes que sin embargo no muestran su repulsa sobre todo lo que enseña Kratos. Ya sabéis cómo funciona a veces la doble vara de medir. 

Estos personajes, por cierto, que se me olvidaba, en ocasiones ofreciéndonos la aparente disyuntiva moral de seguir adelante y sacrificarlos o dejarlos ir. Obviamente, el juego debe continuar.

Resumiendo: un apartado gráfico brutal sólo superado por su segunda parte para el mismo sistema: God of War 2. 

Lo que sí no me gusta demasiado es el modo de suavizado que se puede activar desde las opciones generales. He podido probarlo con un cable de componentes y emborrona bastante. No tanto con el típico RCA. Desconozco si esto ocurre en mis monitores, porque tampoco es tan grave en un CRT.  El que suelo usar para estos menesteres es un Sonitron de la época y luego está este LG.

Kratos en modo Saiyan dándole candela a un fan - God of War.

Los enemigos de God of War:

No sólo ha sido bien tratado el diseño y carisma del personaje principal, que es Kratos, sino también las bestias y criaturas que pueblan el mundo mitológico de GOW. Sin duda, una de tantas de sus características que dieron mucho que hablar a los jugadores y publicaciones de los primeros años dos mil. No sólo por su estilo y reminiscencias a las culturas clásicas como la griega, o formar parte del bestiario de su historia, sino también por la calidad de sus animaciones y las jerarquías utilizadas. Así, nos encontramos con un sinfín de enemigos, entre medusas y arpías, sátiros y no-muertos, centauros, cíclopes y arqueros, que además de variar en su aspecto, indumentaria y colores, también lo hace en cuanto a sus características como escudo, ataque, o vida. Obviamente, si jugamos en la dificultad más alta, esto será aún más perceptible. Pueden bloquearnos, liderar grupos o atacar en solitario, a distancia o cuerpo a cuerpo (melé), consiguiendo agarrarnos si nos quedamos quietos. El mimo con el que han sido creados es sorprendente y la variedad bastante generosa, aunque existen jugadores actuales que aseguran lo contrario. No sé, pero para mí, un videojuego que sin contar jerarquías y jefes llega a la docena, no me parece en absoluto una baja cifra.

La palma se la llevan los enemigos especiales, raros por presencia y gigantescos como el Minotauro. Todos ellos contrincantes temibles. Os recomiendo jugarlo en modo espartano (difícil), ya que el normal sigue siendo muy asequible. Eso sí, tened en cuenta que el primero cuenta con unos picos de dificultad muy exagerados -aunque contados- a lo largo de toda la aventura. El modo fácil ni os molestéis. 

🔊Nota: *Algunos de los modelos descartados podemos verlos en uno de los desbloqueables. 

Kratos bailando una "muiñeira". Tiruliiii tirulaaaa - God of War.

Sonido:

Soberbia y épica, como una buena película. Poco más se puede decir de la magnífica banda sonora que acompaña en todo momento a God of War. Con composiciones realizadas por diferentes artistas, las piezas varían de las orquestales a las corales o ambientales. Con un aire en todo momento que huele a superproducción. Cada instante del juego, cada momento y situación, parece empaparse de los ritmos tribales, las voces y las trompetas. Probad con un sistema de sonido envolvente 5.1 como mínimo, utilizando el DTS, Dolby o AC3 de la consola, disponible con cable óptico. La diferencia es abismal. Una vez hayamos probado así la profundidad del sonido y cómo la consola va posicionando su fuente, no querremos probar otro modo de jugar. 

El resto de los sonidos, como los ataques o los chisporroteos, gruñidos y quejas, al igual que toda la ambientación sonora como las rocas cayendo o el viento recorriendo y silbando entre las paredes, así como los engranajes y la maquinaria, todo está muy bien cuidado rozando la genialidad. No tanto en el doblaje, todavía con excepciones, pues aunque está íntegramente doblado al castellano, la interpretación de Kratos suena poco profunda y desgarrada, por debajo del inglés original. A mí no me cuadra, es una voz demasiado limpia y joven que no pega con la de un tipo duro y forjado en la batalla. Un diez, no obstante, para la narradora que está presente a lo largo de todo el juego. Por mucho, la mejor. 

Oh Virgin Mary... - God of War 

Jugabilidad:

Como suele suceder con los títulos que han creado escuela, la jugabilidad de God of War raya la excelencia exigiendo por su parte, muy poco del usuario sin tener en cuenta su experiencia como jugador del género. Se trata pues, de un videojuego ágil con el que por muy poco se pueden realizar numerosos ataques y combos sea cual sea su dificultad. Ciertamente, algunos de los ataques que se desbloquean, resultan algo más complicados y requieren de mayor práctica, pero incluso rodeados de enemigos, el juego responde perfectamente a las pulsaciones. En God of War no hay jugador novel que valga ni aprendiz, aunque obviamente se necesita algo más para la dominación.

Las acciones de Kratos son, simplemente, apabullantes. El espartano salta (con doble salto si volvemos a pulsar la X), nada, bucea, trepa y empuja o arrastra objetos, además de realizar otros movimientos. La secuencia de ataques, y los combos que se hacen posible, son absolutamente demoledores ya bien sea en tierra o en mitad de un salto. Una de las partes que más disfrutarán los amantes del gore es la capacidad para realizar agarres y ejecutar muertes súbitas cuando al enemigo le queda poca vida. Con los jefes es todavía más espectacular. Y no sólo eso, sino que en determinados momentos también contamos con los espectaculares 'QTE' o "Quick Time Events" popularizados por el clásico Shenmue de SEGA Dreamcast. En concreto estos poderosos ataques, que hacen las veces de minijuego, nos permiten ganar tiempo y acabar de manera más llamativa con los enemigos más fuertes y poderosos. Eso sí, dependiendo del enemigo en cuestión y si fallamos en el intento, estaremos obligados a repetirlo para poder continuar. Además acabar con cada enemigo con un agarre suele otorgarnos más estelas u orbes azules, verdes y rojos. Siempre teniendo en cuenta su rango. 

Los orbes, además de para rellenar vida o "maná", con el que realizar ataques espirituales, también sirven para mejorar nuestro nivel de daño o subir algunas características. 

Te voy a crujir vivvivviviooo - God of War

Como armamento recurrente, tenemos las llamadas Espadas del Caos y la espada de Artemisa, siendo las primeras las más usadas y con varios niveles de transformación. Estas forman parte de nosotros mismos y nos ayudan a realizar todo tipo de ataques y combos increíbles. Desde el tajo sencillo hasta bloquear los ataques de otros, o logrando destripar al enemigo en mitad de un gran salto. Es aún más espectacular cuando dominamos cada ataque, llegando incluso a enganchar a las criaturas y arrojarlas contra el resto de enemigos. La variedad y su límite está casi en nuestra propia imaginación. Acabar con ellos supone mejorar nuestras habilidades y desbloquear más ataques, aunque también podemos mejorar nuestros ataques espirituales. Estos son dones otorgados por los dioses y son cuatro. De todos ellos quizás el Rayo de Zeus y la Ira de Poseidón sean los más espectaculares, pero para mi gusto la del Ejército de Hades es la de más fácil uso y también la más práctica. Lo malo que suele gastarse antes que las demás. También quiero recordar que existen objetos ocultos que nos servirán para aumentar la cantidad de puntos de vida y de "maná". 

Pero no acaba aquí la cosa, y es que nuestro potencial como guerrero va aún más allá. Una vez alcanzado cierto límite de muertes, y visiblemente posible gracias a un escudo griego en pantalla que se va llenando, podemos llegar a un estado de Furia llamado "Furia de Titán". Una vez escuchemos una voz femenina avisándonos de que está activada, seremos prácticamente invencibles. Un consejo, vigilad esta característica, porque sin ella acabar el juego se os hará casi imposible. Al menos en el modo espartano, y lo digo por experiencia.

Y ya que os he hablado de las tortas y tollinas que Kratos reparte a troche y moche, a cada cual más sanguinolenta, quisiera comentaros una de las joyas del título y que no pasará tampoco desapercibida. Estoy hablando del plataformeo al estilo tan propio de otros videojuegos como los Prince of Persia modernos, con saltos imposibles, escaladas, carreras y momentos de equilibrio. También usamos tirolinas y cuerdas, además de servirnos en ocasiones de algunos enemigos, pero de todas son las trampas o puzles donde los desarrolladores han optado por hacérnoslo pasar realmente mal. A veces uno desearía estrangular a cualquiera de los desarrolladores por llevarnos hasta el límite y sin respirar.  En parte, por su dificultad, aunque ya he mencionado aquí que la normal es muy asequible y la fácil ni se contempla. En modo espartano tiene una curva no muy pronunciada que permite ir aprendiendo y mejorando, pero tiene momentos absurdos que se salen por muchísimo de la media. Que yo recuerde: el minotauro, una trampa de cuchillas con el piso rodante y, por encima de todo, y repito: MUY POR ENCIMA DE TODO, el final. En modo normal es algo que se pasa prácticamente sin mucho esfuerzo tras un poco de práctica, pero en modo espartano es... BRUTAL. Yo lo he jugado de esa manera la primera vez y os aseguro que he llegado a sufrir. No quiero ni pensar en modo Dios.

Aquí, haciendo una ñapa bajo el agua y sin masilla - God of War. 

Y ya para terminar, porque enhorabuena a los premiados que se han leído todo este tocho, deciros que, a pesar de lo expuesto, God of War no es únicamente un juego rebosante de acción y sangre. Tiene un alto componente de búsqueda y exploración. Para ello se premia al jugador con objetos secretos y, muy de vez en cuando, algún extra. Por cierto: el juego tiene muchos de ellos que se activan una vez lo hayamos acabado (en su mayoría), al estilo de la vieja escuela. Nada de Dlcs de pago. Como por ejemplo: poder jugar en modo Dios si lo acabamos en modo Espartano.

Algún día lo haremos en modo machote - God of War.

Para que quede constancia de la fecha de término - God of War. 

Conclusión:

God of War es un juego excelente, y que me ha traído -he de reconocerlo- por el camino de la amargura  en algunos momentos. Algo parecido me sucedió entonces con Devil May Cry, también de Playstation 2. Por suerte, retomé éste y también lo pude acabar un poco después que GOW. Suelo dejar por cuestiones que no vienen al caso los juegos empezados hasta nueva orden, y casi siempre en la mayor dificultad. Culpa mía. Pero, por ejemplo, y para que os hagáis una idea, esta reseña la empecé a hacer el 2 de abril de 2023 y el juego lo empecé en serio tiempo antes. No llegáis a imaginar la de reseñas  que tengo pendientes en los borradores. Con lo fácil que era cuando sólo tenía uno o dos juegos para todo el año...

Pero sigamos a lo nuestro:

God of War es un videojuego épico y maravilloso, con un estilo cinematográfico y atrayente, dotado de una calidad técnica y gráfica incuestionable que hace que sea todo un goce para los sentidos. La ambientación es increíble y los enemigos le van a la zaga, además de poder realizar todo tipo de movimientos y ataques para dar rienda suelta a nuestra depravación imaginación. El aspecto final nos traslada fácilmente hasta la Grecia clásica con momentos muy trepidantes -sobre todo con los jefes finales-, convirtiéndose por mucho en un título casi perfecto, majestuoso y brutal. Uno de los mejores videojuegos de la historia. El primero y más entrañable de todos los títulos de la saga. No leas nada salvo esta reseña, no busques más vídeos para convencerte. Juégalo, copón.

Totalmente, sí, totalmente, y lo repito mil veces más, recomendable.

El afeitado más apurado para la sesera - God of War.

Lo mejor:

• Épico.
• Inmenso y considerable, con fondos muy realistas y llamativos.
• Una ambientación de la Grecia clásica tremendísima.
• Puzles y acción por doquier.
• Gore y técnicamente impresionante.
• Variedad de enemigos, pese a lo que otros digan.
• Desbloqueables de la vieja escuela (no como esa basura de los Dlcs).
• La historia engancha.
• Puntos de control y guardado, normalmente equilibrados y en su sitio.
• Posibilidad de mejorar los ataques y las magias.
• Multitud de combos, movimientos y ataques.
• Los QTE ayudan a sacar músculo (el tuyo, porque Kratos ya está mazado).
• Trampas muy ingeniosas.
• Énfasis por la exploración.
• Minijuegos (algunos con contenido picante que hoy sería censurable por la Nueva Inquisición).
• Doblado al español y con una banda sonora muy buena.
• Largo (unas 15 horas en el modo más difícil la primera vez).

Lo peor:

• Algunos enemigos son insufribles.
• 50 fps en la versión PAL.
• Ciertas partes tienen un pico muy alto de dificultad y vuelven a bajar. Se nota más en el modo Espartano.
• Lástima que no podamos comenzar una nueva partida conservando las habilidades anteriores.
• El final es muy bestia.

Kratos enseñando quién manda y lleva los pantalones en casa - God of War. 

Vamos a ver... céntrate, chaval... - God of War. 

¡¡Chao Bacalao!!

*Reseña empezada el 2 de abril de 2023 a las 14:01 y juego terminado el 18 de julio de 2025 sobre las 21:13 de la noche. Duración determinada, unas 15 horas en modo espartano (difícil).